Entre las mejores actividades para potenciar el desarrollo personal y profesional está el conocer, entender y hablar un segundo idioma.
Sin embargo, hace años se creía que la educación bilingüe tenía consecuencias negativas para el cerebro e Incluso se llegó a pensar que podía suponer un peligro para la salud, causando esquizofrenia o trastornos de personalidad múltiple.
Esta creencia ha sido desmentida por numerosos estudios científicos que comprueban que aprender idiomas resulta benéfico tanto para las funciones cognitivas como para el desarrollo personal.
Partiendo de lo anterior, en el siguiente artículo te contaremos lo que sucede en tus procesos de cognición cuando optas por una educación bilingüe.
Ampliar tu acervo cultural potencia el desarrollo de habilidades matemáticas, mejora la atención y perfecciona las habilidades de comunicación en la lengua materna a todos los niveles (gramatical, verbal, de escucha y comprensión).
Que esto ocurra se debe a que durante el estudio se comprenden en profundidad las estructuras y reglas por las que se rige la lengua materna al tiempo en que se desarrolla una mayor capacidad para enfocarse y limitar las distracciones.
Estas son algunas de las razones por las que el bilingüismo potencia el crecimiento profesional, ampliando, por ejemplo, las oportunidades para trabajar en una empresa que opere internacionalmente.
Las habilidades que se desarrollan con el aprendizaje del segundo idioma van más allá de la capacidad para comunicarse en el extranjero o con hablantes de una lengua distinta: consecuencia del esfuerzo que implica construir estructuras gramaticales en otro idioma, también se produce un incremento de la creatividad.
Lejos de afectar al cerebro, aprender inglés favorece el crecimiento de ciertas zonas relacionadas con el aprendizaje. De hecho, en 2012 se descubrió que practicar al menos un idioma adicional a la lengua materna, producía el engrosamiento del hipocampo, la estructura cerebral que regula la memoria.
Junto con el aumento en la capacidad de retención, otro de los beneficios de aprender inglés es que el oído mejora como resultado de que el cerebro deba trabajar más para distinguir entre los sonidos propios de dos o más idiomas.
Además, en cuanto a las habilidades interpersonales, mejoran la autoconfianza y la capacidad para tomar decisiones, lo que también se traduce en un mayor crecimiento laboral y personal.
Según la Academia Norteamericana de Neurología, hablar más de un idioma genera modificaciones cerebrales que facilitan el procesamiento de la información mediante diversos canales.
Además, para los hablantes de un solo idioma se estima que el promedio de edad en que aparece el Alzheimer es de 71,4 años, mientras que en personas bilingües es de 75,5 años. De ahí que matricularse en una de las escuelas de inglés sea también una inversión en salud.
Debido a estos y otros beneficios de aprender inglés, las empresas priorizan esta competencia en la selección de personal, por lo que quienes poseen esta formación aceleran su crecimiento laboral y personal.
A propósito, Harmon Hall ha creado el programa Corporate, con el que brinda atención personalizada a las empresas, colaborando con ellas en la tarea de desarrollar en su equipo humano las habilidades que el estudio de una segunda lengua aporta al crecimiento profesional. Esto a través de cursos de inglés especializados en las necesidades de cada industria.
En ellos, el plan de estudios está diseñado a partir de vocabulario y herramientas comunicativas aplicables a su sector, de manera que los resultados son similares a los que obtendrían las compañías si tuvieran sus propias escuelas de inglés, ¿te imaginas?