Aprender otro idioma es siempre una aventura. Pero esta aventura no puede esperar más porque no encontramos en el escenario que tenemos un viaje importante a la vuelta de la esquina, o nos acaban de ofrecer el puesto que hemos estado soñando en el extranjero. Hay que aprender inglés u otro idioma, ¡pero ya!
En este blog te dejamos estos consejos que pueden ayudarte a aprender inglés o cualquier otro idioma de una manera rápida, fácil y divertida.
Motivación
Tener una motivación, aunque parezca obvio, es lo más importante para impulsarte a aprender un nuevo idioma, ya sea con clases presenciales o cursos de inglés online. Si no tienes un buen motivo para aprender otro idioma, es muy probable que, a la larga, se te acabe la motivación. Querer impresionar a tus amigos con tu nivel de francés no es un motivo demasiado bueno, pero querer conocer de verdad a una persona francesa en su propio idioma o lograr un puesto en Francia es definitivamente otra cosa.
Sumérgete
Ya te has hecho la promesa, te has comprometido. ¿Y ahora qué? ¿Hay algún tipo de camino correcto para aprender?
Trata de absorber cuanto más puedas desde el principio, cultura, historia, etimología, música, lecturas; todo lo que puedas conseguir sobre ese idioma llévalo al extremo y úsalo a lo largo del día. Piensa en ese idioma, intenta escribirlo e incluso hablarte a ti mismo en ese idioma. La ventaja del idioma inglés es que está en todos lados.
Encuentra un compañero
Al igual que el gimnasio, tener un compañero que te ayude con la misma motivación ayuda mucho. Y más si esta persona es extranjera y habla el idioma que intentas aprender.
Tener un compañero o compañera te empujará a seguir intentándolo un poco más y a permanecer motivado.
Diviértete
Usa tu nuevo idioma de forma creativa. Hay gente que aprende japonés grabando canciones (o fandubs) de sus series de anime favoritas. Piensa en alguna manera divertida de practicar tu nuevo idioma: haz un programa de radio con un amigo, dibuja un cómic, escribe un poema o trata de hablar en él con quién puedas.
No temas cometer errores y aprende como niño
Los expertos recomiendan no tener miedo: cuando se trata de aprender un idioma nuevo, todos hablan como Tarzán al principio.
La clave para aprender tan rápido como lo hacen los niños está en tomar determinadas actitudes infantiles: falta de conciencia de uno mismo (en el sentido de estatus social), el deseo de jugar en otro idioma y la disposición a cometer errores.
Sal de tu zona de confort
Perder el miedo a cometer errores significa estar preparado para ponerte a ti mismo en situaciones potencialmente embarazosas. No importa cuánto estudies, nunca hablarás un idioma si no te pones a ti mismo en esa situación: háblales a los extranjeros en su idioma, pregunta direcciones, pide la comida, intenta hacer chistes. Cuantas más veces lo hagas, más rápido saldrás de tu zona de confort y mayor será la facilidad con la que te enfrentarás a nuevas situaciones.
Escucha
Tienes que aprender a caminar antes de correr. En el mismo sentido, tienes que aprender a escuchar antes de hablar. Cualquier idioma suena raro la primera vez que lo escuchas, pero cuanto más lo escuchas más familiar se vuelve y más fácil te será hablarlo.
Atrévete.
Nadie se va a molestar porque le hables en su idioma, aunque sea mal. Si empiezas cualquier interacción con un “Estoy aprendiendo el idioma y me gustaría practicar…” la mayoría de la gente será paciente, te apoyará y te animará a seguir. Incluso si hay aproximadamente mil millones de hablantes de inglés no nativos en el mundo, la mayoría de ellos preferirá hablar su propio idioma si tiene la posibilidad. Tomar la iniciativa de introducirse en el mundo idiomático de alguien facilitará el trato y los pondrá en una disposición más positiva.